HIERBA MILAGROSA

El registro botánico de especies vegetales aprovechables de manera curativa se amplía día a día.Nuevos principios activos se descubren en plantas médicamente desconocidas que se pueden aplicar en la erradicación de enfermedades tan letales como el cáncer o el SIDA.Para este tipo de dolencias fatales, la panacea puede encontrarse entre una de esas matas que pueblan el dosel del bosque lluvioso.
A menor escala, dentro del entorno rural, se ha transmitido de generación en generación el conocimiento de esas apetecidas hierbas campestres que tan efectivas se demuestran ante dolores y males cotidianos, como el generalizado dolor de cabeza o el estreñimiento.Ese apego al terruño y la experta y paciente contemplación de la naturaleza circundante ha permitido la divulgación popular de numerosos remedios caseros cuya materia prima indispensable se obtiene de la flora autóctona.
Todo esto viene a colación de un popular remedio para eliminar verrugas cutáneas, esas repulsivas excrecencias que aparecen cuando y donde menos te lo esperas y que son tremendamente contagiosas.Resulta que en rincones umbríos, al borde de los caminos o brotando de grietas en las paredes vegeta una vivaz plantilla de la familia de las euforbiáceas, Euphorbia helioscopia, de color verdoso claro que segrega a través de su tallo un látex lechoso blanquecino que, aplicado uniformemente sobre la verruga a desecar durante un período de tiempo continuado, consigue difuminar esa deformación oblonga y fofa de la piel.
Claro que la aplicación del látex debe reducirse a la zona afectada por el apéndice verrugoso.Parece ser que la ingestión del viscoso fluido o el untado del mismo sobre cualquier otra área sana de la piel puede producir irritación, urticaria, ardores estomacales o vómitos.Al igual que cualquier medicamento prescrito, el remedio natural posee sus contraindicaciones.Y conviene conocerlas en la misma medida que las presumibles propiedades curativas.Toxicidad y curación están separadas por una fina y permeable membrana que no conviene tensar.
Saludos.
Etiquetas: Herbolario
2 Comments:
Y en cristiano alcarreño cómo osa llamarse la tal euphorbia? porque seguro que en tu pueblo y en el mío no la conocen por semejante nombre. Cuéntamelooooo, andaaaaaa!!!
Un besete!
Ana:
Supongo que seguramente la conocerás bajo la acepción de lechiterna o lechetrezna...Su látex es extremadamente ponzoñoso por aplicación directa, conozco un episodio familiar con final feliz...Y lo mal que lo pasó¡¡¡
Agur.
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