MANARA

Desde que aparecieron los primeros ejemplares allá por los albores del siglo XX, varias generaciones han encontrado en el comic un modo ameno de entretenimiento, que estimula la imaginación, aunque una exacerbada credulidad pueda conducir a luctuosos sucesos de todos conocidos.El comic o historieta se compone de una sucesión de ilustraciones gráficas con o sin texto que tratan de provocar una respuesta estética por parte del lector.

La temática del comic es y ha sido siempre muy variopinta, aunque siempre han obtenido un enorme éxito los relativos a héroes, monstruos y villanos de diversa calaña.Entre esa tupida maraña de valerosos superhéroes y perversos antihéroes, medran otros géneros de comic como son los eróticos, humorísticos o puramente artísticos.

El comic erótico es una creación relativamente reciente, aunque para los entendidos en este tipo de coleccionables, la figura del dibujante italiano Milo Manara emerge con luz propia dentro del panorama erótico del comic.Se afirma que nadie como él sabe obtener una plasmación gráfica tan fidedigna del cuerpo de una mujer.Sus ilustraciones rezuman una sensualidad que desborda los precisos trazos que delinean el cuerpo de sus inmortalizadas heroínas.Además, el desarrollo narrativo de sus episodios no desmerece a las suntuosas imágenes que desgranan la historieta.

Sus obras se perciben como una sólida amalgama artística, donde las palabras son el complemento ideal a las impresiones gráficas, incluso cuando carecen de texto que aderece y sazone el sabroso pote.En estos tiempos tan proclives a la idolatría y la glorificación, Milo Manara ya forma parte de ese exclusivo Olimpo de dibujantes de comic, por derecho propio.Dicho todo esto desde mi perspectiva eminentemente masculina.Tal vez, lectoras conspicuas de este vuestro blog amigo, vosotras manejais otras vertientes acerca del particular.Los lectores seguro que no disienten demasiado.Y si lo hacen, no lo van a decir.

Saludos.