KIMONO
Su sola mención remite a vetustas imágenes del país del Sol naciente, ancladas en sólidas tradiciones niponas transmitidas a lo largo de generaciones.Puede parecer contradictorio el contraste entre el Japón vanguardista, ultramoderno, sofisticado, terriblemente innovador y ciertas preconcepciones y costumbres de corte feudal que todavía gozan de una envidiable salud entre la compleja maraña social nipona.
Mientras que un sufrido ejecutivo disfruta plácidamente de un merecido reposo en un estrecho nicho a todo confort, un distinguido miembro de la realeza debe observar un rígido protocolo de acentuada severidad.Ya pasaron los tiempos gloriosos de samurais y daimios, referentes destacados del Japón feudal, enterrados por la revolución Meijí que impulsó el desarrollo industrial y comercial del país.Aunque permanece viva la figura de la geisha como parte importante del folklore japonés.
Básicamente la función destinada para una geisha era procurar el entretenimiento del hombre u hombres que pagasen lo estipulado por sus servicios, que incluían desde el canto hasta la danza pasando por la declamación poética, la ceremonia del té y, por que no, los placeres derivados de la práctica sexual.Profusamente embellecidas mediante maquillaje y extravagantes peinados y ataviadas del inseparable y vistoso kimono, hornadas de estas mujeres han hecho las delicias del sexo fuerte.En este caso, y para no constituir una excepción, la sociedad japonesa abusó del machismo reinante tanto como otras sociedades más cercanas a la nuestra.
Adoptado como vestido tradicional japonés, el kimono consta de una pieza de tela de seda que se envuelve alrededor del cuerpo al que se sujeta mediante una ancha faja.Es una prenda unisex, apta tanto por hombres como por mujeres, que los japoneses usan un ocasiones especiales como ceremonias o acontecimientos de tipo cultural como festivales o representaciones teatrales.
Que se trata de una prenda tremendamente cómoda no creo que quepa duda.Aunque, sinceramente, seguiré deleitando los ojos de mis allegados solamente.Además, con la que está cayendo ahí afuera, me temo que debería ponerme pantys o algo similar para abrigar y enfundar mis piernas.Y no creo que eso esté demasiado bien visto por mis convecinos.
Saludos.
Mientras que un sufrido ejecutivo disfruta plácidamente de un merecido reposo en un estrecho nicho a todo confort, un distinguido miembro de la realeza debe observar un rígido protocolo de acentuada severidad.Ya pasaron los tiempos gloriosos de samurais y daimios, referentes destacados del Japón feudal, enterrados por la revolución Meijí que impulsó el desarrollo industrial y comercial del país.Aunque permanece viva la figura de la geisha como parte importante del folklore japonés.
Básicamente la función destinada para una geisha era procurar el entretenimiento del hombre u hombres que pagasen lo estipulado por sus servicios, que incluían desde el canto hasta la danza pasando por la declamación poética, la ceremonia del té y, por que no, los placeres derivados de la práctica sexual.Profusamente embellecidas mediante maquillaje y extravagantes peinados y ataviadas del inseparable y vistoso kimono, hornadas de estas mujeres han hecho las delicias del sexo fuerte.En este caso, y para no constituir una excepción, la sociedad japonesa abusó del machismo reinante tanto como otras sociedades más cercanas a la nuestra.
Adoptado como vestido tradicional japonés, el kimono consta de una pieza de tela de seda que se envuelve alrededor del cuerpo al que se sujeta mediante una ancha faja.Es una prenda unisex, apta tanto por hombres como por mujeres, que los japoneses usan un ocasiones especiales como ceremonias o acontecimientos de tipo cultural como festivales o representaciones teatrales.
Que se trata de una prenda tremendamente cómoda no creo que quepa duda.Aunque, sinceramente, seguiré deleitando los ojos de mis allegados solamente.Además, con la que está cayendo ahí afuera, me temo que debería ponerme pantys o algo similar para abrigar y enfundar mis piernas.Y no creo que eso esté demasiado bien visto por mis convecinos.
Saludos.
Etiquetas: Fashion, Obsesiones
3 Comments:
Me encantan. Son preciosos.
No te pongas panties, ponte LEOPARDOS, dan más calorcito, aunque el glamour se te va a tomalpolculo, aviso.
Beso :P
Anita:
Me pongo del lado del glamour, o sea, que me decanto por los pantys...los leopardos arañan las piernas...quita, quita...
Agur.
No esperaba mucho más, la verdad...
Agur.
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