ALEJANDRO MAGNO

¿Se imaginan a alguien capaz de cortar el nudo gordiano, superar las infranqueables murallas de Tiro, adueñarse de la fatua Babilonia, cruzar más allá de las puertas persas, alcanzar el remoto Indo, combatir contra elefantes, navegar por un mar proceloso y desconocido para finalmente hallar el fin en la flor de la existencia?

Alejandro Magno, digno hijo de Filipo de Macedonia, es un personaje histórico que trasciende la propia historia, soñador maravilloso, visionario, aventurero, audaz, valiente, todas ellas cualidades que hablan por sí solas de la calidad del excelso adalid.

Pero lo que para mí es realmente admirable y destacable de Alejandro Magno, es ese impulso natural e irrefrenable puesto al servicio del conocimiento, de la búsqueda constante, de la aventura por la aventura.

Retrospectivamente, su periplo, y el de aquellos que lo sufrieron en sus carnes acompañándole en sus campañas, se puede calificar como una gesta colosal, no en vano estamos hablando de los años 334-323 antes de Cristo.

Me quedo con su ávida inclinación por la aventura.Aunque espero no compartir su final.

Saludos.