ATRASCO

Son muchos los trabajadores que a diario deben desplazarse por carretera para llegar a sus centros de trabajo.Son muchos los que se ven abocados a soportar las pertinaces retenciones diarias que se producen en las vías de acceso a las principales capitales en las que se hallan sus lugares de trabajo.Mucho se ha hablado acerca de la casuística de los atascos de tráfico, lo cierto es que cada vez es mayor el número de conductores y consiguientemente el de vehículos y es una cuestión temporal el que antes o despues en una vía con una elevada densidad de tráfico se produzca una retención en algún momento del día.

Aunque para casi todos aguantar estoicamente un atasco de tráfico no deja de ser un mal menor que hay que llevar con resignación cristiana, si uno se para a pensar resulta que, si se contabiliza el tiempo perdido acumulado en tales aglomeraciones, está siendo esquilmado, estafado, virtualmente robado o atracado respecto a su desempeño vital, retenido contra su voluntad, máxime cuando es usuario/sufridor de transporte público.

Comprendo que haya personas que tienen una necesidad acuciante respecto del automóvil en lo que respecta al desplazamiento a su lugar de trabajo.Pero encuentro disparatado que el 99% de los turismos que circulan por las vías de acceso a las grandes ciudades, que son realmente los verdaderos causantes de las caravanas, estén únicamente ocupados por el propio conductor.Y siendo justo, he de reconocer que debo incluirme dentro de esta última categoría, algo que resta credibilidad a mi denuncia.Supongo que hay que amortizar la fuerte inversión que supone la adquisición de un vehículo y si hay que soportar atrascos, se soportan.En ese aspecto, el estoicismo es profesión de fe.Quizás la única.

Saludos.